He decidido romperme el corazón.

Esta puede ser la despedida. Digo “puede ser” porque me he prometido constantemente alejarme de ti y no he podido, digo “puede ser” porque aunque mi cerebro esta consciente del inmenso dolor que me provocas, aunque estoy consciente de mi vida rompiéndose en pedazos; mi corazón necesita del amor que le das a cuenta gotas y siempre termina arrastrando su dignidad a tus pies, por un cumplido, por una linda palabra que salida de tus labios o tu pluma y que convierta mi día gris en un cielo azul, aunque sea el presagio de una tormenta.

Quizá te sorprendas de que piense así, quizá todo esto está dentro de mi cabeza, pero por mi bien necesito alejarme de ti, tu cercanía me hace sentir vivo, la imposibilidad de estar contigo me hace desear la muerte; sentirte tan cerca, saberte tan lejos, sentirte tan mi_ saberte tan suy_ me está matando por dentro.

No puedo despedirme sin agradecerte, tu luz me ha iluminado en tiempos oscuros, tu calor ha llenado mis noches frías, tus palabras me han llevado al cielo… sin importar lo que ha pasado después…

Una carta escrita despues de mucho tiempo

No he escrito muy a menudo, pero hoy me es necesario decir, no me he sentido bien últimamente.

No me he dado cuenta de cómo ha pasado tanto tiempo, para mi parecen solo minutos, pero el tiempo no perdona, el tiempo erosiona al corazón y los resultados parecen no mostrarse poco a poco, un día te despiertas y el pecho duele y entonces… solo entonces… te das cuenta de que algo murió dentro de ti.

Perdí hace tiempo las ganas de escribirte, porque siento que no me lees, hace tiempo que me cansé de tocarte por que tu piel no me responde como antes. Pero quizá sea normal, el amor es humano y todo lo humano es un ciclo y todo ciclo se cierra, quizás es simplemente que hemos desgastado el amor en el camino y hoy se terminó, que gota a gota el rio se secó y que de tanto darte… hoy me quede sin nada.