martes, 15 de agosto de 2023

Alud

Increíble como un simple chasquido de dedos, el aleteo de una mariposa, el gesto en tu cara; provoca el alud.

Demasiado tiempo, demasiados años, demasiados recuerdos se deslizan a una velocidad vertiginosa y descontrolada.

Detesto esa mirada condescendiente y estúpida de víctima; al mismo tiempo inexpresiva y petulante con un injustificado complejo de superioridad que definitivamente no te va. Con un dejo de desprecio que siempre negaras que sientes.

Se agolpan los recuerdos, los desprecios, la negligencia, el desapego y me da asco mirarte a la cara. Mientras mis ojos se llenan de lágrimas miro la montaña entera desencajarse y deslizarse hacia mi sin poder mover un músculo, incluso si mi vida depende de ello y ¿sabes por qué? No tendría caso. Nunca lo ha tenido.

Se que solo durará un momento y todo habrá pasado, sé que dolerá como hace diez años, pero será solo un instante y miraré por el ventanal como aquella noche y a través del vidrio de la camioneta y recordaré el mensaje escrito y la canción sonando en los audífonos y el calor negado y el espejo del baño a las dos de la mañana llorando preguntándome “¿por qué?” … la traición, la rabia, el desamor, la confusión, la catástrofe; todo impactándome junto y al mismo tiempo, moliéndome los huesos aplastando mi corazón y moriré otra vez sin remedio.

Nunca comprenderás este dolor. Nunca comprenderás el impacto de una simple acción y el alud cayendo sobre ti; rompiéndote en pedazos tan pequeños que te desintegran y te hacen sentir nada, o peor aún, el sentimiento más oscuro que me hiciste sentir, sentirte mal de ser tú mismo, de tu propia esencia.

Pero claro, nunca prometiste amarme, nunca prometiste cariño o amor; todo estaba en mi imaginación hiperactiva y naturaleza dramática.

Nunca entenderás que no tiene caso hablar, que es un recurso que agoté hace mucho tiempo. Después de todo ¿Cómo hablar con un alud que se aproxima a gran velocidad hacia ti?

Nunca comprenderás que un pequeño ruido puede desencadenar una avalancha.

Nunca entenderás este dolor.