Otra vez parcece que no puedo dormir, se cierra una semana mas y aunque estoy cansado no puedo dejar de pensarte. No se en que momento me ilusioné asi, quizas es por esa insesante busqueda de alcanzar lo inalcanzable, de lograr lo imposible; de perseguir el sueño original de esa alma gemela perfecta y de ese complemento que hará latir mi corazón como un niño ilusionado.
Quizas no vueva a verte mas, quizas se cortaron de tajo mis ilusiones y momentos magicos y tontos que hacían mis días mas divertidos; tu sonrisa transparente, tu olor acaramelado, tu ojos lindos, claros y buenos; tu actitud paternal, tu manera de ser sencilla y honesta ante la vida que hacia latir mi corazón rapido como un niño ilusionado.
No fuiste mas que algo platonico, algo que jamas sería y que aprendí a vivir con eso sin siquiera sufrirlo un poco. A mi edad he aprendido a vivir con la realidad desde un punto de vista logico. No me afecta, no hay por que; son los hechos y ante los hechos no hay nada que hacer, ¿entonces? Entonces solo era feliz con los hechos, con la parte tuya que era mia, que tomaba sin que te dieras cuenta, los minutos, los detalles, las charlas que sin darte cuenta guardaba en un cajon como pequeños tesoros que me hacían feliz como un niño ilusionado.
Solo puedo darte las gracias hombre bueno, por la amistad sincera, las instancias compartidas, los buenos momentos que siempre guardaré, esta particular historia que nunca existió, esta sensación que no sabes que existe en mi interior, esa burbujeante sensación que histe sentir dentro de mi identica a la de un niño ilusionado.