Extrañas pesadillas dan vueltas
por mis sueños, solo quiero despertar y darme cuenta de que esta es otra de
ellas… mirar la suave luz de la mañana entrando por la ventana y ver tu cara
sobre la almohada, ver tus ojos cerrados y tu expresión de niño y saber que
nada de esto pasó.
Pero mi vida parece ser la
pesadilla en estos momentos, la incertidumbre y la tristeza se han tomado mis días; sé que lo merezco, se que me lo he ganado, se que tengo muchas culpas en esto y
eso me está destruyendo día a día.
La pesadilla parece interminable,
es claro que no lo será, pero lo parece. Pasan los días y no logro entender muy
bien las cosas: tus decisiones, tus acciones, tus palabras en el umbral de la
mentira, no se si creer en ti; no se si son las decisiones correctas, no se si volverás,
no se si debo irme. Me aferro, me aferro aunque eso haga de mi vida una
pesadilla, me aferro por que no estoy listo para soltarme. Me aferro porque aún
tengo esperanza.
Soñé que estabas aquí a mi lado, soñé
que hablabas tranquilamente conmigo y me decías “arreglamos las cosas el sabe
que te amo a ti, el sabe que quiero estar contigo, se va y aunque es difícil al
menos parece que es lo correcto y estará todo bien” yo no podía creerlo, la
pesadilla había terminado de una manera más fácil y sin tanto daño…
Y entonces desperté… tu no estabas
a mi lado… había sido solo un sueño… había despertado de mi sueño a mi
realidad, mi realidad que se parece tanto a las pesadillas que me invaden al
dormir, que me hacen despertar ahogado a las cuatro de la mañana… Era por
primera vez en mucho tiempo un sueño bueno… despertar fue cruel no solo por
salir de mi ilusión, despertar hoy fue cruel por que fue un recordatorio. Durante estos días mi vida real, mi día a día es la pesadilla; es ese sueño del
que tratas de despertar y no puedes, no puedes por que es la realidad. Es ese
sueño en el que sabes que estas atrapado e intentas cambiar el rumbo de las cosas,
pero no puedes por que todo parece ya estar escrito.
Es ese sueño que te ahoga, que te
hace perder la fe, la fuerza y la esperanza.
El sueño es quizás el lugar mas
hermoso, me gustaría dormir para siempre, en el sueño te beso, te abrazo y
duermo a tu lado y al despertar mirar la suave luz de la mañana entrando por la ventana y ver tu cara sobre la almohada, ver tus ojos cerrados y tu expresión de niño. Me gustaría nunca mas tener que despertar a la pesadilla que es mi vida real.
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